La opinión de un defensor de los toros.
Explicarles a estos seres la nula relación entre el sufrimiento de un ser y la libertad de decidir sobre su tortura es una pérdida de tiempo. Lo suyo es talibanismo vulgar, carpetovetonismo primario y soez.
La postura de la Asociación Americana de Dietética es que las dietas vegetarianas adecuadamente planificadas, incluidas las dietas totalmente vegetarianas o veganas, son saludables, nutricionalmente adecuadas, y pueden proporcionar beneficios para la salud en la prevención y en el tratamiento de ciertas enfermedades. Las dietas vegetarianas bien planificadas son apropiadas para todas las etapas del ciclo vital, incluido el embarazo, la lactancia, la infancia, la niñez y la adolescencia, así como para los atletas.
La profesión médica está gritando «¡qué viene el lobo! y nosotros nos lo creemos. Los médicos están bombardeando constantemente el país con artículos diciendo a los vegetarianos que deben comer productos animales como carne, pescado, huevos o leche y queso para obtener una cantidad suficiente de vitamina B12. Están agrupando a todos los vegetarianos juntos y sin hacer distinción alguna. Sólo por que pueda haber algunos vegetarianos enfermos que no pueden absorber vitamina B12 no significa que todos los vegetarianos no puedan absorber la vitamina B12. La mayoría de la gente que se ha pasado al vegetarianismo están enfermos y esta enfermedad es la razón por la que cambiaron sus dietas. La mayoría de ellos declaran de buena gana que desde que cambiaron han estado más sanos que en toda su vida. Uno o dos vegetarianos pueden tener poca vitamina B12 pero esto no significa que a todos los vegetarianos estrictos les ocurra lo mismo, o que alguna vez les vaya a ocurrir.
Dos berenjenas
Cinco dientes de ajo
Un manojito de perejil
250 ml. Aceite de oliva virgen
100 ml. Vinagre de vino.
Sal al gusto
Nota: La cantidad de vinagre depende del gusto de cada uno.
PREPARACIÓN
Pelamos las berenjenas y la laminamos muy finita, ponemos en una fuente extendida con un poco de sal.
Los ajos y el perejil los picamos muy pequeños.
Ponemos las berenjenas a la plancha hasta que estén doraditas.
En una fuente colocamos una capa de berenjenas, le añadimos el ajo, el perejil, aceite y vinagre, continuamos poniendo otra capa de berenjenas y repetimos el mismo proceso hasta que las terminemos.
Tapamos la fuente con un papel film y las dejamos en la nevera, al menos, dos horas antes de comerlas.
COSAS QUE DICEN LOS QUE VIENEN POR AQUÍ